Los amantes del mundo marítimo y del pescado tienen hoy, Día
del Libro, la oportunidad de degustar este placer más allá del sentido
culinario. La literatura está llena de referencias marinas donde el sector pesquero ocupa un lugar protagonista y en este día Nutryfish On Line quiere
compartir contigo algunos títulos:
La casa de Lúculo o el arte de comer, de Julio Camba
Julio Camba, escritor y periodista madrileño publicó en 1961
su obra La casa de Lúculo o el arte de comer. En ella no dudó en elogiar el sabor
de uno de sus pescados preferidos –también lo es para nosotros: la sardina. El autor
plasma así su debilidad en la siguiente cita: “Sería capaz de fugarme un día
con los fondos confiados a mi custodia nada más que para irme a un puerto y
atracarme de sardinas. Una sardina, una sola, es todo el mar”.
El viejo y el mar, de Ernest Hemingway
El novelista estadounidense Ernest Hemingway no dejó pasar
la ocasión para plasmar la temática pesquera en una de sus últimas obras,
publicada en 1952: El viejo y el mar. En el libro, un anciano pescador se enfrenta a los recuerdos
de toda una vida en la soledad del mar, con la única compañía de su barca y un
enorme pez que se resiste a ser capturado. Después de una larga espera, el viejo
consigue hacerse con el enorme ejemplar que acabará con su mala racha y restablecerá su malograda reputación.
El pescador y su alma, de Oscar Wilde
El escritor Oscar Wilde también quiso plasmar la fragancia
del mar en la novela El pescador y su alma, publicada en 1982. Aquí, un pescador se
ve en la tesitura de elegir entre su alma y su amada cuando un día en el que sale
a faenar pesca a una bella sirena, de la que se enamora perdidamente. Sus
condiciones humanas no le permiten vivir en el agua junto a ella y si quiere adquirir las propiedades de un pez
tendrá que renunciar a su propia alma.
El pez Arcoiris, de Marcus Pfister.
También los niños tienen ocasión hoy de disfrutar de la
gustosa combinación del pescado y la lectura con el libro: El pez Arcoiris,
escrito por Marcus Pfister. Con el protagonista de este cuento, los más pequeños aprenderán una
lección básica: la de la necesaria humildad con sus compañeros, no obstante las
virtudes físicas y materiales que se tengan.
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